Aunque no es saludable obsesionarse con el aspecto físico, está claro, y todos estaréis de acuerdo en ello, que no nos va a hacer ningún mal prestarle un poco de atención para variar. Todos sabemos que nuestra apariencia es una especie de carta de presentación que no necesita palabras.
Lo primero que los demás ven de nosotros es nuestro físico, y si queremos causar buena impresión en los demás, a la vez que nos sentimos más seguros de nosotros mismos, es necesario que realicemos algo de entrenamiento diario.
No es necesario que le dediquemos interminables horas al día, como hacen algunas personas, pues con máquinas de fitness como la plataforma vibratoria es posible llegar a conseguir un cuerpo atractivo a la vista con tan sólo 10 minutos diarios sobre ella.
En entrevistas de trabajo, reuniones sociales o de negocios e, incluso, a la hora de encontrar pareja, el físico, queramos o no, juega un papel decisivo.
Dejando a un lado si la persona es más o menos agraciada, en lo que más solemos fijarnos cuando conocemos a alguien es en si tiene un aspecto cuidado o no. Y en este campo no sólo entra si va aseado, bien vestido, correctamente afeitado o favorablemente maquillada, si hablamos de una mujer, sino que también entra en juego su vitalidad, postura, energía, agilidad mental y física… Terrenos que aumentan en calidad y cantidad cuando el individuo practica ejercicio diario.
Por lo tanto, podríamos llegar a la conclusión de que para causar una buena impresión en los demás es muy importante que tratemos bien a nuestro cuerpo, lo cuidemos y, si es posible, lo tonifiquemos, dentro de lo razonable, con aparatos de última generación como las plataformas vibratorias.
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